23 de febrero de 2009

LA TRISTEZA Y LA FURIA

En un reino encantado donde los hombres nunca pueden llegar, o quizá donde los hombres transitan eternamente sin darse cuenta...
En un reino mágico donde las cosas no tangibles se vuelven concretas...
Había una vez...
un estanque maravilloso.
Era una laguna de agua cristalina y pura donde nadaban peces de todos los colores existentes y donde todas las tonalidades del verde se reflejaban permanentemente...
Hasta aquel estanque mágico y transparente se acercaron la tristeza y la furia para bañarse en mutua compañía.
Las dos se quitaron sus vestidos y, desnudas, entraron en el estanque.
La furia, que tenía prisa (como siempre le ocurre a la furia), urgida -sin saber por qué-, se bañó rápidamente y, más rápidamente aún, salió del agua...
Pero la furia es ciega o, por lo menos, no distingue claramente la realidad. Así que, desnuda y apurada, se puso, al salir, el primer vestido que encontró...
Y sucedió que aquel vestido no era el suyo, sino el de la tristeza...
Y así, vestida de tristeza, la furia se fue.
Muy calmada, muy serena, dispuesta como siempre a quedarse en el lugar donde está, la tristeza terminó su baño y, sin ninguna prisa -o, mejor dicho, sin conciencia del paso del tiempo-, con pereza y lentamente, salió del estanque.
En la orilla se dio cuenta de que su ropa ya no estaba.
Como todos sabemos, si hay algo que a la tristeza no le gusta es quedar al desnudo. Así que se puso la única ropa que había junto al estanque: el vestido de la furia.

Cuentan que, desde entonces, muchas veces uno se encuentra con la furia, ciega, cruel, terrible y enfadada. Pero si nos damos tiempo para mirar bien, nos damos cuenta de que esta furia que vemos es sólo un disfraz, y que detrás del disfraz de la furia, en realidad, está escondida la tristeza.

Jorge Bucay

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Esta historia es muy parecida ala frase que dice:``la tristeza de una mujer suele ocultarse bajo su sonrisa´´...muchos solemos ocultar nuestra tristeza bajo una sonrisa o en este caso bajo la furia.
Hay muchas personas que se hacen los duros y serios y solo para ocultar que por dentro están destrozados y para que los demás no lo veamos ,pero,hay un algo que los delata y es, la mirada de quién lo está...

el guardián dijo...

Vamos a tener que hacerte una mención honorífica por tus comentarios, Katherin. Gracias.
"Sad eyes never lie" decía Bruce Springsteen ("Los ojos tristes nunca mienten")

Anónimo dijo...

Me alegro mucho de que "los guardianes" hayan puesto un texto de Jorge Bucay. Me gustaría que pusieran una sobre una niña francesa y enferma de este autor, si recuerdo el nombre o la encuentro, lo haré saber. Aunque hay otras muchas historias muy bonitas de este autor.

Anónimo dijo...

Creo que se llama "El pintor" pero no estoy muy segura. Hay otros dos cuentos también muy bonitos:"El buscador" y "La caja de besos"

el guardián dijo...

Esperamos que el relato publicado sea el que decís.